Coser se ha puesto de moda.

Se dice que después de la pandemia se ha intensificado el uso de las máquinas de coser, debido al auge de las mascarillas, ahora veamos que nunca es tarde para aprender. Y la costura puede convertirse en tu nuevo pasatiempo favorito, Unos beneficios que se pueden observar tanto a nivel psicológico como físico de las personas que lo practican son:

• Estimula la creatividad en esta labor manual.
• Fomenta los aspectos cognitivos relacionados con la concentración o la percepción espacial.
• Nos sirve para relajar nuestras emociones y disminuir nuestra ansiedad y estrés. 
• Favorece las relaciones sociales. Es un divertido y ameno pasatiempo que puede compartirse con un grupo de personas. 
• Y a nivel físico favorece la motricidad fina, la coordinación entre la mano y el ojo y la precisión; además de servir de ayuda en la prevención de enfermedades como la artritis, con especial incidencia en las manos. 

Beneficios de trabajar con las manos

Trabajar con las manos  potencia nuestra salud psicológica, y coser es una de esas tareas que se imponen y es una muy valiosa actividad con la que estimular el cerebro, ya que ayuda aliviar el estrés, mejorar la plasticidad neuronal, optimizar nuestra destreza, así como la concentración e incluso la calma mental, y sabes porque ocurre, porque usar nuestras manos es una tarea que no exige mucho cognitivamente, le da a la mente la oportunidad de relajarse y descansar.

Estamos hechos para ser activos y hemos utilizado activamente nuestras manos como parte de nuestra supervivencia diaria durante miles de años. Con tanta tecnología, muchos de nosotros presionamos un botón y logramos hacer muchas de las actividades diarias con el  mínimo esfuerzo físico.

Claro le agradecemos mucho a la tecnología porque hay muchos aparatos que nos ayudan muchísimo, sobre todo a las madres emprendedoras, tal es el caso de la lavadora, o la aspiradora, por nombrar algunos.

Casi podríamos decir que hemos llegado a un punto en nuestra sociedad donde se está devaluando la competencia manual, donde el hacer las cosas por ti mismo no está de moda, y eso es tan absurdo, que me atrevo a decir que raya en la ignorancia, porque nos olvidamos de las manos, de su movilidad y ante todo de su gran potencial creativo, y les doy un ejemplo,  no se puede sustituir el amor transmitido a través de las manos de una madre que le hace comida a sus hijos o de hacer ropa, como es el caso de nosotros los amantes de la costura, hacer nuestras propias prendas nos hace sentir orgullosos y bendecidos de las manos que tenemos, o por lo menos así me siento yo, cada vez que una técnica de costura nos queda bien de tanto practicarla, es una sensación indescriptible, es un chute de energía y de orgullo hacia lo que hacemos, y nos ratifica que estamos hechos para esto.

Y no estoy en contra para nada de la tecnología, pues yo soy una fanática empedernida de todo lo que vaya saliendo nuevo, me encanta, pero como todo en la vida debe haber un balance ya que ambos tópicos, el  de la productividad intelectual y la productividad manual siguen siendo esenciales en nuestro día a día.

¿coser ayuda con la depresion y la apatia?

Yo tengo mucha inquietud sobre este tema de la depresión y cómo nos afecta de manera directa en todos los ámbitos de nuestras vidas, por eso me atrevo a hacer este post y hablar de esto, y como nuestro arte puede ayudarnos a salir de ese estado de tristeza, y lo digo por experiencia propia, a mi este arte me ayudó y me salvó de caer en un estado crítico, y lo agradezco profundamente, espero que si estas pasando por algo asi esto te ayude a entender porqué es tan bueno coser y trabajar en general con nuestras manos en este mundo tan tecnológico.

Esto mismo es lo que nos lo explica al menos la doctora Kelly Lambert en su libro Lifting Depression: A Neuroscientist’s Hands-On Approach to Activating Your Brain’s Healing Power. Se trata de buscar un tipo de actividades manuales que activen nuestro circuito neuronal de recompensa, ahí donde haya cierto esfuerzo cognitivo, además de concentración y placer por lo que somos capaces de conseguir.

“Lo que acelera el crucial circuito de recompensas impulsado por el esfuerzo -el combustible, si se me permite el término- se genera al realizar ciertos tipos de actividades físicas, especialmente las que involucran las manos. Es importante que estas acciones produzcan un resultado que se pueda ver, sentir y tocar, como tejer un suéter o cuidar un jardín. Tales acciones y sus pensamientos asociados, planes y resultados finales cambian la fisiología y la composición química del circuito de recompensas impulsado por el esfuerzo, activándose de una manera energizada. Le llamo ‘recompensas impulsadas por el esfuerzo’ a la sensación emocional de bienestar resultante».

Kelly Lambert también vincula la falta de actividad física práctica con el inicio de la depresión, tal vez contribuyendo a las tasas inusualmente altas detrastornos del estado de ánimo que vemos en el mundo actual, quizá debido a la pandemia que nos mantuvo todo ese tiempo en confinamiento, ella resalta:

“Las recompensas impulsadas por el esfuerzo y otras experiencias interactivas del mundo real generan reacciones mucho más intensas y generalizadas en el cerebro que las alteraciones neuroquímicas producidas por una sola píldora. ¿El resultado? Empezamos a sentir más control sobre nuestro entorno y más conectados con el mundo que nos rodea. Esto reduce el estrés y la ansiedad y, lo más importante, aumenta la resistencia contra la aparición de la depresión».

Algo que debemos tener claro es que solo el hecho de aprender a coser no hará que nuestra depresión desaparezca. Trabajar con las manos  revierten incluso los efectos del estrés crónico. Esto es muy importante, porque de ese modo, la persona se siente más receptiva y relajada para ir afrontando su depresión, digamos que funciona como un catalizador, un medio para cambiar nuestra química cerebral, de inducir un estado de bienestar interno que, si lo combinas con otras estrategias como la terapia psicológica, puede dar sin duda grandes resultados. No obstante, veamos con detalle qué logra en nuestro cerebro el trabajar con las manos:

• Cambia la fisiología y la respuesta química del cerebro: se libera endorfinas, serotonina, endorfinas, se reduce la hormona del cortisol asociada al estrés…
• Las tareas manuales mejoran la plasticidad neuronal, se crean nuevas conexiones y con ello, hacemos frente al deterioro cognitivo.

La costura y sus valiosos beneficios.

Estamos hablando de la costura y sus valiosos beneficios, ya no solo para ampliar nuestro fondo de armario o dar una nueva vida a prendas viejas, sino como una terapia efectiva para estimular nuestra creatividad y frenar el deterioro cognitivo. Usar nuestras manos puede ser clave para mantener un estado de ánimo saludable y coser puede ayudarnos a combatir los sentimientos de irritabilidad, apatía y depresión.

Entendamos algo, no es que lo diga yo, es que ya está comprobado que la conexión mano-cerebro supone para el ser humano esa alianza esencial que actúa como retroalimentación para favorecer nuestro desarrollo neuronal. Esta es una realidad que desde la antropología y la psicología se conoce desde hace décadas.

Ese eje constituido entre el ojo, la mano y el cerebro, se alza como una fabulosa ‘constelación’ intelectual y emocional que sigue favoreciendo múltiples beneficios en nosotros.

Coser potencia nuestras conexiones neuronales y facilita así la plasticidad cerebral.

Coser tiene algo que activa  a potencias nuestras conexiones neuronales y facilita así la plasticidad cerebral,  y te preguntarás  ¿De qué manera? es mediante la creación y la transformación. Deben existir una serie de procesos donde se dé un resultado que nos satisfaga. Así, tareas como la nuestra coser, tejer, dibujar, o incluso plantar una flor, esculpir o modelar con masa, generan una transformación material que se ve reflejado en el plano emocional.

Las tareas manuales mejoran la plasticidad neuronal y se crean nuevas conexiones neuronales, pero no todas las tareas manuales generan beneficios psicológicos, porque si trabajamos en una fábrica o en una cadena de montaje, con un jefe que nos estresa por entregar una producción, eso nos genera más estrés , eso difícilmente nos generará bienestar, Se trata de  trabajar con las manos desde la curiosidad, la pasión y el interés de aprender, y que sea placentero, y que nos incentive, bueno y  si con ese hobby podemos hacer dinero, entonces es un increíble emprendimiento. 

Apasionados de la costura, Nos vemos en el próximo post.